domingo, 2 de abril de 2023

2 de abril. Día mundial de concienciación sobre el autismo.

Día 2 de abril que llega, día 2 de abril que se disfruta y se comparte.

Por estos lares seguimos navegando por aguas azules de la mano de nuestro bombón Tea y he aquí la actualización. 

Físicamente está gigante. Hace dos semanas me preguntó una señora por la calle si mis hijos eran trillizos. Lo que es bastante representativo del tamaño que gastan mis gemelos a sus 8 años. Están casi tan altos como Jomío que está a punto de cumplir 13. Tengo dos bestias pardas por hijos.  

Y tengo digeridos ya 7 años de ese maldito y bendito diagnóstico de autismo.

Echando la vista atrás es impresionante el camino. Pero en el día a día estoy tan centrada en poner las luces de corto alcance e ir superando días y semanas que no es hasta que me decido a hacer una “retro” que no me doy cuenta de lo lejos que hemos llegado.

MiLeo está gigante y fantástico.

Habla poco pero habla. No será cantante ni locutor de radio pero se comunica verbalmente. No tiene la verborrea de su hermano mayor ni la de su madre ni su dramabuelo pero se comunica sin problemas cuando él quiere comunicarse. Como su padre vamos. 

Sigue controlando su superpoder de conectarse y desconectarse del entorno próximo. Ya quisiera yo decir “voy a no pensar en nada y a no dejarme alterar por nadie” y pudiera conseguirlo como él. Leo dice “ahora no estoy para nadie” y no está. Le llamas, le molestas, le tocas, le bailas la macarena en arameo y el tío ni pestañea. No como yo que digo que voy a desconectar y me tumbo en la cama haciendo listas mentales de tareas pendientes y mierdas varias.

Sigue haciendo estereotipia con los brazos en todos los idiomas posibles, pero ya no temo que salga volando porque pesa un quintal. Y como prueba las TRES camas que llevamos con él en 1 año. Ha roto dos estereotipando encima de ellas de tanto impulso que se da y de tanto que pesa (52kg, mide algo más de 1,50 para tener la foto entera). A ver qué aguanta la tercera.
Y maldita la hora en la que le dije que en su cama no se estereotipaba, que se estereotipaba en la nuestra que es la más robusta de todas. Porque a veces le da por venir a estereotipar a las 7 de la mañana. Tú estás tan feliz soñando con tus vikingos y de repente empiezas a saltar literalmente en tu propia cama y no por un empotre a dos tiempos, sino por un mico de 52 kg estereotipando y sonriendo.

Es un experto en señales de tráfico y normas de circulación. Mucho me tendría que equivocar para no atinar al decir que será guardia urbano o profesor de autoescuela o algo así. Aunque la última vez que le pregunté que quería ser de mayor me dijo que bombero. El cuerposerrano y la fuerza los tiene, ahora bien, la cultura del sacrificio y del esfuerzo mis hijos como que no. Ninguno de los tres. Se conoce que el tamaño del cuerpo es proporcional al de los huevos y les pesan para prácticamente todo.

Recientemente he descubierto que Leo tiene picardía. Cuando me voy de casa a hacer deporte fuera (caminar, en bici, yoga o al gimnasio) Leo me coge el móvil para jugar aún sabiendo que entre semana no puede. Y cuando entro por la puerta me viene corriendo me mira a los ojos directamente y me dice: “La mama no s’enfada”. La canguro se chivó de que me decía eso porque me había cogido el móvil. Aunque tampoco era necesario porque cada vez que me pilla el móvil me lo encuentro lleno de logos de LG.

Sigue siendo el mimado de su clase. El viernes la madre de una compañera de clase me envió una foto en la que está sentado en el patio rodeado de esta compañera y dos niñas más y le están acariciando y él dejándose querer.

Y el resto de la tropa también están fantásticos, gigantes y algo porculeros.

Massimo sigue en sus trece de ser youtuber, no tener ni repajolera idea de qué hay que hacer para ser youtuber no es obstáculo para él. Él quiere ser Youtuber y será Youtuber porque no hay niño más decidido, convencido y cabezonaco. Ayer me recitó un trozo de una canción y al terminar me dice: “Mamá esto es lo mejor que has oído en toda tu vida mundial”. Dos apuntes:

Uno, no lo preguntaba, lo afirmaba. Y dos, “de tu vida mundial”, Massimo hace unas combinaciones al hablar dignas de estudio. Sigue yendo a la logopeda, no vaya a haber un minuto de paz en esta casa.

Jomío está en plena metamorfosis de gusano de seda a mariposa, está en plena fase capullo. Y aunque aún no literalmente porque sigue siendo adorable, ya tiene momentos de “déjame en paz tú no lo entiendes” y se pasa el día torturando a sus hermanos gemelos y abusando de su posición de poder. Y yo, que soy hermana pequeña, me subo por las paredes. Pero le quedan dos días porque los gemelos van a ser más grandes que él y se las van a devolver muahahahaha.

En resumidas cuentas, Leo está bien, y si él está bien todos estamos bien 😊💙

Feliz día mundial de concienciación sobre el autismo a todo el mundo especialmente a todas las familias con un pajarito azul.

En otro orden de cosas me han hackeado la cuenta de Instagram y he tenido que abrir otra mientras trato de recuperar la mía. La nueva es @estoesparauna_alba En otro post compartiré la historia del hackeo porque hay un tío en Chicago que me está echando un pulso y no le está saliendo gratis ñeñeñe :b

viernes, 25 de noviembre de 2022

Mass, modo survivor limitless extrem on.

Tres hijos como tres soles y lo único que tienen en común son sus padres y que los tres son clones del padre hasta en el metabolismo caribeño.

Por lo demás, cada uno en las antípodas del otro.

Luca (aka Jomío) es un encanto lo mires por donde lo mires. Razonable, noble, empático, tranquilo y alegre. Es un poco “dramanieto” y su "dramabuelo" no puede estar más feliz. 

Hace unos días apareció a medianoche en el salón porque decía que no podía dormir porque tenía “tormentos del pasado”. Como no fueran tormentos del recreo no sé yo. Pero ahí le teníais explicándoos que a veces se alegraba cuando regañamos a su hermano Massimo y eso le hacía sentirse mala persona. Que a ver, regañar a Massimo forma parte de mi rutina diaria de ejercicios porque es para darle de comer a parte. Y Luca pobre, se sentía culpable por haberse alegrado cuando su hermano se había llevado algún moco por incordiarle hasta el infinito y más allá.

Leo es mi leoncino azul. Mi bombón autista que me tiene el corazón robado. Autismo aparte, es dulce, tranquilo, introvertido, inteligente y saltarín. No puedo con él, me tiene totalmente enamorada. A parte físicamente se está postulando como un dios vikingo en toda regla y se me cae la baba a chorretones con esas espaldas. 

Él está enamorado hasta las trancas de su señal de rotonda que ya la hemos adoptado como la cuarta hija, viene con nosotros a todos lados, la alimenta, la acuesta y la cuida. Está haciendo con ella todo el juego simbólico que no ha hecho en 7 años. Bienvenida sea la señal de rotonda a la familia. Amén.

Y después tenemos al benjamín. Massimo. Éste nació en modo survivor limitless extrem. O lo que es lo mismo, dispuesto a sobrevivir a sus hermanos, a sus padres y a toda la especie humana con alegría y porculismo a partes iguales.

Menudo tío. Siete años y ya dando por culo como si tuviera quince.

Massimo quiere ser youtuber. Y lo tiene claro no, lo siguiente.

Anoche le preguntó a Jomío: ¿Tú qué quieres ser cuando seas un niño más mayor? (porque se ve que no van a dejar nunca de ser niños, mira que suerte la mía...guiño...guiño).

Jomío: Astrofísico.

Mass: ¿Por qué?

Jomío: Porque me gusta la física y el universo.

Mass: Eso será aburrido. Yo seré youtuber. Diré “Saludos a todos, suscríbete a mi canal y dame un like”.

Se giró hacia mi:

Mass: ¿Mamá a los 12 años ya puedo ser youtuber?

Ese es mi futuro. Un mico de 7 años que quiere ser youtuber de videogames. Que a ver, si nos tiene que sacar de pobres no seré yo la que le corte las alas. Según él, a los 12 se abrirá un canal que tendrá muchos suscriptores y ya. Le veo algunas lagunas a su plan...

Si Leo nos rompió los esquemas de lo normo típico, Massimo nos terminó de sacar de la zona de confort a ostias. Que no haya un minuto de paz en esta casa.

Es un niño con una seguridad en sí mismo acojonante, no duda de sí mismo para nada. Nunca. Jamás. Ever. Él es está seguro de todo y es feliz, siempre. Y le suda soberanamente los cojones lo que el mundo piense, opine o respire, incluida su madre.

Un día random a la hora de comer:

“Mamá yo no me como la verdura porque es que a mi no me gusta” en tono condescendiente como si me hubiera equivocado al ponerle el plato.

Yo: “Pero te las tienes que comer igual”.

Me mira fijamente a los ojos, respira hondo como diciendo “Señor dame paciencia con esta mujer”.

“Mamá, es que a mi NO ME GUSTA (vocaliza bien esta parte como si no me estuviera enterando bien) la verdura, yo no como verdura. ¿Lo entiendes?”

Le falta solo darme dos palmaditas en la espalda de “ale, circula bonita”.

Hace unos días arropándole por la noche me suelta: “Gracias mamá, eres una buena chica”.

Se conoce que soy una buena chica cuando hago algo por él como arroparle, alimentarle, abrazarle… lo que viene siendo ser su madre vamos.

No tiene los cojones más grandes porque no le caben en los pantalones.

Es sincero hasta doler.

“¿Por qué en la escuela te comes los garbanzos y en casa no?”

“Por qué los de la escuela están muy buenos y los tuyos tienen un sabor así como de asco”

Menos mal que mi autoestima culinaria emigró allá por 1999 y me toca un pie ser un desastre en la cocina.

Su día ideal es un día en casa todo el día, en pijama, jugando a la play. Como un adolescente medio pero con 7 años en lugar de 15.

“Massimo vístete y acompáñame a hacer la compra”.

“Uy no, que estoy muy bien en pijama en el sofá”

“Es una orden”.

“¿En serio? Bueeeeeno, pero compramos galletas de chocolate blanco y fanta de naranja”.

Siempre poniendo condiciones a todo y negociando lo innegociable.

En la cola del súper. Con esa voz chillona y poco discreta que tiene:

“Mamá, ¿ya llevas suficiente dinero para pagar todo esto?”

En el coche.

“¿Puedo conducir?”

Y así.

No es que ve a mi futuro, es que mi futuro ya está aquí.

¡Buen fin de semana!

viernes, 11 de noviembre de 2022

Soy autismom.

Y a veces se me olvida. Se me olvida que esto es duro y es de por vida.

Y es que, aunque Leo es una infinita maravilla y nosotros lo llevamos muy bien, siempre hay días y siempre va a haberlos en los que todo se vuelve negro oscuro como el ojete de un orco de Mordor.

Esta mañana ha sido uno de esos días. Y lo ha desencadenado una soberana y efímera gilipollez, o no.

Long story, short: Los gemelos van a 3ero de primaria. Hoy tenían excursión en el colegio, pero hace un par de días que la cancelaron porque había previsión de lluvia para hoy. Informaron a los niños para que informaran a sus padres. ¿Me informaron mis hijos a mi o a su padre? No. Leo porque es autista y la comunicación es punto débil. ¿Te informó por otra vía la escuela para asegurarse de que te llegaba el mensaje? No. ¿Te molesta? Pues tampoco porque me gusta que traten a Leo exactamente igual que al resto de sus compañeros y a mi exactamente igual que al resto de las mamás.

Llegamos a la escuela esta mañana, hago el desembarco de rubios y salen corriendo hacia el edificio principal. Y veo a mi lado a un par de mamás de su clase y de repente mi sentido arácnido me dice que algo no va bien porque sus hijos llevan las mochilas normales en lugar las de excursión y confirmo, efectivamente, que hoy no hay excursión (los nubarrones del cielo también sugerían que hoy excursión poca pero a mí, que me planté un mes de junio en Estocolmo en chanclas, a optimista no me gana nadie).

Y yo: ¡Ostras! ¡No lo sabía, no me han dicho nada!

Y una de las mamás: “No te preocupes, no pasa nada”.

Y ahí AHÍ mi cerebro ha hecho un CLIC. Y supongo que se me ha notado en la cara porque han insistido: “No te preocupes mujer que no pasa nada. Verás como la maestra...blablabla” Y he dejado de oír. Se me ha puesto el corazón a mil, me he dado media vuelta, me he subido al coche y me he vuelto a casa llorando como una magdalena.

En esa fracción de segundo de CLIC he pensado, sentido y vivido en lo más profundo de mis entrañas que evidentemente mi hijo a diferencia del resto de niños no me ha informado porque es autista, y me he dejado llevar por el catastrofismo mental: nunca será autónomo, nunca podremos comunicarnos de manera efectiva, nunca tendrá amigos, será víctima de bullying, nunca, nunca, nunca y un largo etcétera de torturas mentales. 

Me he tirado llorando una hora, por suerte estaba el padre en casa que es la máquina perfecta de abrazos y la persona más tranquila y racional que conozco. Y juntos hemos echado la vista atrás recordando dónde estábamos hace 5 años cuando nos dieron el diagnóstico y dónde estamos ahora, y eso me ha devuelto la cordura. Suerte la mía de tenerle.

Llevábamos dos días en casa hablando de la excursión, entre otras cosas por la anticipación para Leo y porque soy una motivada.

Yo: “¡Qué guay mañana de excursión!”

Y ellos: ¡Siííí!

Yo: ¿Y de qué queréis los bocadillos?”

Y los dos: “¡Yo de jamón! ¡Y yo de queso!”

Yo: ¿Tenéis ganas de ir?

Ellos: ¡Síííí!

Yo: ¿Y a dónde vais?

Mass: ¡A la torre de la Carrova!

Leo: ¡A la rotonda a ver señales!


Aquí tendría que haber confirmado lo de la excursión con las otras mamás dada la discrepancia de opiniones ya que ambos iban a la misma. Lección aprendida por mi parte.

Leo tiene la excusa de su autismo pero el cernícalo de su hermano gemelo no. En su caso se conoce que el tamaño de sus cojonazos le afecta a la memoria a corto plazo. Por lo visto a parte de autismom soy cojonazosmom.

 

sábado, 2 de abril de 2022

Mi Dios Vikingo. My Viking God.

Y no me refiero a Ragnar Pantibreaker Lothbrok, sino a tu Leo. Ay mi Leo como está y cómo se está poniendo. 

Hace ya un tiempo de la última actualización sobre mi ratón autista así que hoy vengo a compartir su último release: la versión 7.0 de Leo.

7 años hace que vino al mundo con su gemelo a joderme el sueño, las lumbares y el suelo pélvico. Bueno esto último afortunadamente no porque debido a su tamaño indecentemente gigante fueron cesárea. Menos mal, de lo contrario hoy al estornudar mi DIU aparecería en Perpignan.

7 años de su nacimiento y 1750 días de su diagnóstico de TEA. O lo que es lo mismo: 4 años, 9 meses, y 14 días. ¿Obsesionada yo con el calendario? … Y 5.555 días quedan hasta la cena a la que nos va a invitar Leo a su terapeuta y a mi. 22 añitos tendrá la criatura y aún no lo sabe pero nos vamos a pegar un festival a su costa, para celebrar lo bien que lo estamos haciendo y lo habremos hecho.

Porque si criar a un hijo tiene tela, criarlo con necesidades especiales tiene tela especial. Porque no nacemos aprendidos, aprendemos sobre la marcha a base de ensayo-error le llaman los científicos, a ostia limpia le llamas tú.

Afortunadamente Leo es un niño bastante fácil. Es un niño tranquilo, no tiene reacciones violentas (no las ha tenido nunca hasta le fecha), aprende rápido y es muy cariñoso. Encima está creciendo a una velocidad de vértigo y con sus 7 años y 3 meses mide 1,42mts y está guapísimo. 

Este niño va a ser un pibón, un Dios vikingo. Y no lo digo solo yo, lo dicen sus compañeras y compañeros de clase. Cada mañana en la escuela queda corroborado. Hay un grupo de niñas y niños de su clase que cuando le ven aparecer por la puerta salen corriendo hacia él y se discuten por darle la mano. Él, con ese don autista de ausentarse del entorno próximo cuando le place, se muestra con la mirada perdida en el horizonte con pose misteriosa y seductora, cuando en realidad está repasando mentalmente su colección infinita de señales de tráfico ajeno al revoloteo de niñas y niños a su alrededor.

Recibió una carta en casa de una compañera que le decía que era muy bueno, muy guapo y muy cariñoso.

Y tú te debatiste entre la muerte por babas intensas o el homicidio en primer grado de "pelandrusquita" de 7 años. Nada, lo primero a todas luces.

Todos los viernes vais al parque con un grupo de compañeros/as de la escuela y siempre acaba Leo y su metro cuarenta y dos rodeado de niñas que le llegan al pecho pidiéndole abrazos, jugando con él, explicándole las normas del juego con paciencia y atención, guiándole si no entiende algo o si se despista (porque entra en su campo de visión una atractiva señal de tráfico)... Y tú babeando, babeando fuerte por la suerte de tener este entorno en el que crecer.

Ha avanzado mucho en la comunicación verbal aunque queda trabajo por hacer. Cada vez se desconecta menos. Y aunque es un súper poder que se niega a abandonar al menos está aprendiendo a usarlo con moderación, a no sudar olímpicamente de todo y de todos, vamos. 

A nivel curricular sin problemas, y ya sabemos que es un niño de ciencias puras purísimas, adora las matemáticas y le da por culo (literal) leer. Lee estupendamente pero se niega a leer en voz alta. Sabemos que lee porque si le preguntas sobre el texto, responde correctamente. De comprensión lectora bien, y de cojonazos del tamaño de Oklahoma también.

Hoy es el día mundial del autismo y no querías dejar de participar compartiendo los avances de tu Dios vikingo particular. Esta tarde vas a participar en una charla sobre autismo en Iaioland, compartiendo tu experiencia como madre de un Dios vikingo niño autista.

 

Feliz día mundial de concienciación sobre el autismo.



[ENGLISH VERSION]


My Viking God.


By Viking god I don't mean Ragnar Pantibreaker Lothbrok, no. I mean Leo, my Leo. Oh my God, he’s growing so fast and he is getting so handsome!

It's been a while since my  last update on my autistic little pea, so today I want to share the latest release: Leo’s 7.0 version.

7 years ago he came into the world with his twin to f**k my sleep, my lower back and my pelvic floor. Actually, not this last one, fortunately due to their indecently gigantic size they were a c-section, otherwise today when sneezing my IUD would show up in Perpignan.

7 years since he was born, 1750 days after his ASD diagnosis. In other words: 4 years, 9 months, and 14 days. Obsessed with the calendar? Not at all… And only 5,555 days left for a dinner with his therapist that will be on Leo. He will be 22 years old and he will invite us to celebrate how well we are doing it and will have done it.

Raising a child is hard and raising a child with special needs is harder. Because we weren't born knowing how to be mothers and fathers. We learn by doing, based on trial and error according to scientists, based on the f***ing hard way according to me.

 Fortunately, Leo is a pretty easy kid. He is a calm child, he doesn’t have violent reactions (or has not so far), he is a fast learner and he is kind. In addition to that, he is growing so fast and being 7 years and 3 months he is 1.42 meters tall and he is gorgeous. This kid is going to be a Viking God. And I’m not the only one saying so, his classmates say it too. I see it every morning at school. There is a group of girls who come to him when he shows up, they run towards him and argue about holding hands with him. In the meantime, Leo has his gaze lost in the horizon with a mysterious and seductive pose, thinking on his traffic signals no noticing the fluttering of girls around him.

Once he even received a letter at home from a girl telling him that he was very good, very handsome and very kind.

At that moment you didn’t know what to do: melting to death or killing a future daughter in law. First option, of course.

Weekly on Friday we go to the park with a group of schoolmates and Leo with his 1.42 meters always ends up surrounded by girls who go up to his chest asking for hugs, playing with him, explaining carefully the rules of the game and assisting him when he gets struck by an attractive road sign and he gets lost. And you melt, melt so hard by being so lucky of having such a nice and loving environment to grow up in.

He has gone through a long way in verbal communication but there is still a lot of room to improve. He is less disconnected from the world. And despite of being his favorite super-power, he is learning to use it with responsibility which means not having this “I don’t give a shit about this” attitude all the time.

At school he is doing great. We do already know he loves math and hates language. He doesn’t like reading. He reads brilliantly but refuses to read aloud. We know he reads well because he understands what he reads. He is doing great in reading comprehension and in being stubborn as hell.

Today is World Autism Day and I want to participate by sharing the improvements of my Viking God. This afternoon I will participate in a talk on autism in Iaioland, sharing my experience as a mother of an autistic Viking God child.

 

Happy world autism awareness day.

miércoles, 21 de abril de 2021

L·U·C·A

Esta mañana te ha dicho que mañana hará once años que vino a crear esta familia. Un enfoque muy suyo. En su día debió de veros un poco despistados y decidió venir a poner orden, ya como embrión dándoos lecciones. Sobre todo a ti que con cuarenta y dos años a veces tienes la madurez de una mesa y él con sus once tiene más inteligencia emocional que tú.

Es un buen niño bueno. Muy responsable y educado. Cada vez que salís juntos en bici va saludando a todo ser humano con el que os cruzáis, ya vaya en bici, a pie o en cosechadora. Siempre tiene una sonrisa y un “buenos días” para cada uno mientras tú vas gruñendo por lo bajini porque cuando pedaleas tienes todas las neuronas concentradas en que el sillín de la bicicleta no te haga otro hijo.

Es considerado, amable y muy sensible. Siempre preocupándose por todos los que le rodean, a veces demasiado y eso le hace sufrir. Es tan empático que va a pasarlo mal en muchas ocasiones. Esperas poder enseñarle a no sufrir o a sufrir menos, pero sin dejar de ser tan empático como es. También es un poco amante de las causas perdidas y se empecina en ayudar a quién considera que lo necesita. En eso se parece enormemente a su padre, son un par de idealistas y soñadores empedernidos.

Con él vuestra vida cambió exponencialmente a mejor, también dejasteis de dormir exponencialmente a una puta mierda, tradición que sus hermanos gemelos años más tarde mantuvieron, no se les fuera a ocurrir a sus padres dormir más de media hora seguida.

Por suerte tus genes en ellos finalmente han hecho acto de presencia en forma de marmota y ahora cada noche hibernan.

Es sincero hasta doler y eso a veces ha hecho tambalear tu autoestima de acero con sus dardos de amor. Pero dardos al fin y al cabo. “¿Ya vas a cocinar otra vez? Mejor dame besos que eso sí sabes hacerlo” o “Tienes la barriga fofa pero me gustas mucho”.

Él te inspiró a abrir el blog y fue durante años su protagonista indiscutible. Después llegaron el par de dos y tuvo que compartir cartel.

Es un digno heredero de dramabuelo, es todo un drama nieto con sus sentencias espontáneas como “Mi paciencia es escasa igual que las precipitaciones en la Cataluña seca” o como cuando se agobia de repente y sin venir a cuento porque en breve se convertirá en un adolescente y él no quiere porque “me volveré idiota de un día para otro y os contestaré mal y os enfadaréis siempre conmigo”. Dramabuelo está infinitamente orgulloso de él.

Le encanta el fútbol, claro que si a su padre le encantara la plancha extrema a él también le encantaría. Es su mini yo y tienen una de las relaciones más bonitas que has visto nunca.

En su primer partido como portero les metieron mil goles pero se lo pasó bomba, cuando terminó el partido vino corriendo hacia ti y te preguntó “¿Hemos ganado o hemos perdido?” No había ni hay niño más feliz en la faz de la tierra.

Es tan sociable que en cada viaje que habéis hecho con él habéis llegado al destino conociendo la historia de toda la tripulación de cabina y de los pasajeros colindantes. Y si su padre se lo lleva a un concierto se haces amigo de todos los que le rodean y cuando tocan su canción favorita todos al unísono gritan: "¡¡Luca es tu canción!!". Porque se ha encargado personalmente de explicarle a todo el mundo cuál es su canción favorita.

Sus hermanos gemelos son los niños más afortunados por tenerle como hermano mayor. Se preocupa por ellos y se deja mangonear todo lo que les da la gana. Nunca abusa de su posición de poder por ser el mayor e incluso deja que el competitivo de Mass gane siempre que hacen carreras de patinetes para darle el gusto. Aún no son plenamente conscientes de la suerte que tienen de tenerle.

Su hermano Leoncino no puede tener un mejor ángel de la guarda. Muestra una paciencia infinita con él (heredada de su caribeño padre) y se adapta siempre a sus ritmos. Te derrites cuando le ves metido en la cama de Leo con él haciéndole masajes para que se relaje, o explicándole cosas que sabe que a Leo le cuesta entender. De vez en cuando le achucha y le insta a que pruebe cosas nuevas pero siempre tiene la sabiduría de saber si es buen momento o no.

Como cuando con solo mirarte sabe si has tenido un buen o un mal día y en función de lo que vea se te lanza encima acribillándote a preguntas y a besos o bien hace el moonwalker hacia su habitación sin dejar de hacer contacto visual con la fiera (aka tú) por si le pegas un bufido. Y si has tenido un mal día sabe girar tu día 180 grados en un instante con su sola presencia y su verborrea.

Vienen tiempos duros, la adolescencia es una etapa súper importante para su desarrollo personal y puede llegar a ser una etapa muy dura. La afronta con una autoestima de titanio y deseas fervientemente que nada ni nadie le haga tambalear esa autoestima ni esa seguridad en sí mismo. Deseas que siga queriéndose y respetándose como lo ha hecho hasta ahora, que su padre, sus hermanos y tú le seguiréis acompañando, arropando y venerando hasta el infinito y más allá. 



T’estimem Luca.

 

viernes, 19 de marzo de 2021

Hombre de paciencia infinita solo hay uno.

Y tiene metabolismo caribeño.

Le encanta el picante. Para él se escribe “picante” pero se lee “no hay huevos”. A punto habéis estado en alguna ocasión de ir a urgencias porque se ahogaba.

Cuanto más hace estocon la mano mejor italiano cree que habla.

En otra vida debió de ser una gallina porque come pipas y altramuces a velocidad supersónica.

Le encanta que le toquen el pelo. Le anula cualquier atisbo de voluntad.

Tiene tamaño XL pero le encanta ir en mini.

Es capaz de distinguir todas las tonalidades de la paleta de colores Pantone y de hacer combinaciones espectaculares entre ellas, pero es incapaz de combinar los colores de la ropa de los niños.

Una vez se metió 12 mentos a la vez en la boca. Se le abrió hasta el ojete.

Tiene flow. Mucho flow.

Tiene las manos muy bonitas pero los pies de belleza discutible.

Forma parte del AMPA de la escuela de vuestros hijos y es el contacto oficial de emergencia de esta casa. El día que a los gemelos les dio por hacer el Marie Kondo por la terraza y tirar de todo a la calle, todos los vecinos le frieron el móvil a llamadas y a ti ni una. 

Se preocupa porque Jomío adquiera buenos hábitos de estudio y disfrute aprendiendo. No como tú que empollabas el día antes, vomitabas el contenido el día después y llorabas porque te resultaba una tortura.

El autismo de vuestro hijo no le coarta. Le gusta ir a sitios con los niños que tú antes te lo pensarías dos veces y siempre le sale bien. El binomio papá Leo siempre funciona.

Toca el clarinete y le encanta descubrirles a los niños la música clásica y sus grandes compositores y obras. Así tenéis a Alexa, bien confundida entre Cantajuegos y el Canon de Pachelbel.

Le gusta aprender de todo y cosas muy dispares, desde el origen de la vida hasta el cambio de pelaje testicular del macaco del norte de África.

Nadie se discute con él si él no quiere.

 


No es perfecto, pero se acerca.

Feliz día del padre, hombredepacienciainifinta. 

T’estimem.

 

martes, 21 de abril de 2020

Abraza el caos y deja fluir el flow.

En esta casa sobrevivís porque como dice tu madresférica amiga Mónicahas aprendido a abrazar el caos. Y con él a dejar que fluya el flow.

Y qué menos si tienes en casa la fuente original del flow infinito: el padre y su metabolismo caribeño.

Si lleváis 40 días encerrados calculas que tu marido va por su quinto día de confinamiento, a su ritmo, sin prisa. Pero el resto de la familia empezáis a acusar el mes largo que lleváis confinados.

Jomío cumple 10 años mañana en pleno confinamiento y lo lleva regulero. Cuando está entretenido es feliz pero cuando se aburre se agobia hasta extremos de drama grecorromano y va como alma en pena por la casa.

Los gemelos lo llevan bastante decentemente, incluso Leo que es autista. Solo ha necesitado salir 2 veces en 40 días y romperos 3 cables de cargador en 2 días porque de toda la vida de dios que arrancar cables a lo vikingo relaja. Por lo demás, lo de estar pegados a vuestro culo todo el santo día les está sentando de maravilla, igualito que a sus padres (guiño, guiño). Ellos son los que aportan el caos y la energía infinita a esta casa. Con ellos eso sí,  habéis renunciado a llevar al día las actividades de la escuela, no os da la vida y además en esta casa no disponéis de:
  • Cartulinas DinA4, A5, A3, A2, R2, D2, C3, PO.
  • 256 rotuladores de colores gordos y finos, y no tan gordos y no tan finos.
  • Pegamento en barra, líquido, spray, aspersor y a manguerazos.
  • Materiales reciclados: cilindros de papel higiénico, de rollos de cocina, hueveras de huevos de gallina, de codorniz, de avestruz y de dinosaurio.
  • Purpurina de unicornio y materiales de texturas varias para los talleres sensoriales.
Aún tuvisteis suerte y os pilló el confinamiento con tres bolis bic azules y uno rojo.
Y tú, culo de mal asiento, estás haciendo teletorturatrabajo. Tu jornada es lo más anárquico e impredecible que te ha pasado en la vida pero has aprendido a contar con tu flow para sobrevivir. Porque cada puto día la misma historia.

Te despiertan los gemelos a las 7 porque vienen a vuestra cama a daros besos y patadas en la misma proporción. Desde esa hora ya empiezan a pelearse y a pedir el desayuno. Normalmente te hace salir de la cama una patada en la vejiga que a esas horas anda llena. Les preparas el desayuno, se dejan la mitad, ensucian la totalidad y se largan al comedor.

Les pides que se quiten el pijama y se vistan. Te ignoran. Pero no te alteras, el flow yatusabeh...

A las 9 tienes la primera vídeo, una stand up rutinaria con el equipo. Te salen los dos gemelos por detrás saludando a la gente por su nombre. “¡¡Ooohhh que monoooooos!!!”. Monos TUS COJONES.

Los echas, vuelven a entrar. “¿Con quién hablas? ¿Quién es éste?”. Que os vayáis. Y te llenan a besos  delante de todos haciéndote quedar como una borde. Después no habrá manera humana de que vengan a saludar a lo abuelos en una vídeo familiar pero si es de trabajo, pegados como lapas al pc.

En algún punto aparece el mayor ofendido con el cosmos porque precisa de tu ayuda para con sus deberes.
Paras tu actividad y te aplicas con él mientras él se rasca los huevos a dos tiempos a tu lado. Te cabreas. Se agobia. Te agobias. El padre que pasaba por allí hace el moonwalker porque sabe que si se acerca cobra.

Consigues que se aplique y que haga los ejercicios con “más o menos” buena letra. Es el poder del flow. Y de cuatro amenazas de una muerte lenta y dolorosa. Pero con mucho flow.

¿Podré jugar a la play después?”. Le dices que sí pero con tono de “perdona vidas” porque sabes que no puedes negársela. La play os está salvando a todos en esta casa porque no solo vive de juegos bélicos y bien conducida es una mina de entretenimiento familiar. Pero sí, matar orcos y zombies relaja un huevo y al flow hay que alimentarlo de vez en cuando.

Cada 10 minutos los gemelos se discuten por la tablet. Después por los portátiles, tienen uno cada uno y ambos son exactamente iguales pero se pelean porque quieren el del otro y viene el drama. Leo se pone a chillar. Massimo le riñe. Después se pelean por tus móviles. Y de repente se ponen a jugar tan contentos al bingo juntos (¡ZEZENTA Y TREZ! Un zeiz y un trez.). La paz dura lo que tardas en ir a sentarte frente al ordenador.

A la hora del “¡Mierda la comida!” sale el padre al paso y se encarga él. Ni te preocupas en preguntar qué comerán porque van sobrados de nutrientes. Lo que te preocupa es que la nevera no esté al 100% de su capacidad porque tus hijos ante hambruna inminente se comen al miembro de la familia más débil, tú.

Devoran. Ni siesta ni ostias. Aprovechas que están con la barriga llena y un poquito menos activos para intentar trabajar. Trabajas 40 minutos y empiezan Los Juegos del Hambre de la tarde.

A las 18:00 todos a la terraza aunque diluvie y haya vientos huracanados. Intentáis con poco éxito que hagan algo de ejercicio y cuando os dais por vencidos ellos solos empiezan a perseguirse y a correr de una punta de la terraza a la otra terminando agotados y sudados.

El padre prepara entonces una barra de pan entera de bocadillos para merendar. 

Yo quiero frambuezaz y un kiwi”. De verdad que hay un gemelo que no parece hijo vuestro. Fruta para él, veneno para el resto.

Seguís en la terraza haciendo el cernícalo. A las 20:00 a aplaudir. Tu naturaleza histérica te hace arrancarte a las 19:45 pero gracias al flow consigues esperar hasta las 19:48.

Aplaudidos los sanitarios, los trabajadores de primera necesidad, los niños, las mascotas, Batman y Santa Claus, arrancáis la rutina de noche cuya meta es el sofá libre de niños.

Se encarga el padre porque tú tienes vídeos de trabajo por el desfase horario con Estados Unidos. Tus compañeros de allí creen que padeces algún tipo de trastorno mental porque ellos están recién levantados, duchados, centrifugados, esponjosos y motivados y tú estás con pintas de náufrago y de estar al borde del suicidio.

Finiquitada la jornada laboral haces media hora de ejercicio intenso con la app Centr del mismísimo Thor (Chris Hemsworth) que tiene una sección de meditación narrada por The God of Thunder himself y eso te carga el flow y te permite sobrevivir a un día más. Y es que tu flow tiene la voz profunda de Chris Hemsworth que para eso es tu flow y le pones la voz que te da la gana. Abrazad a Chris Hemsworth amiguis, digo el flow, ¡abrazad el flow!.